domingo, 15 de septiembre de 2013

Tenemos que pensar y procurar la iglesia que queremos - I. M. Baker

La Iglesia modelo congregación y la Iglesia modelo familiar 


Podemos entusiasmarnos con predicaciones, sermones bonitos y decir:- ¡qué bien habló!, y sentir el impacto de la palabra… pero no modificar los aspectos fundamentales para que hagan efecto en nuestras vidas. Es una enseñanza que fue… y viene otra el próximo domingo, otro sermón, otra predicación...Pero no es así como tenemos que tomar lo que el Espíritu nos dice. Acaso si nos marca algo ¿no debemos de trillar sobre ello hasta que se ponga en orden la iglesia, para que el reino de Dios- es decir su gobierno- se establezca en ella?

• Iglesia modelo congregación:

Lo estándar, lo que se ve en todas partes: el templo o local, un lugar donde se centran las actividades de la iglesia.

Iglesia modelo familia:

Las actividades de la iglesia son descentralizadas, realizándose en los hogares (eso no que decir que no nos tengamos que reunir en un salón, no está mal la reunión), pero si la reunión es todo- y detrás de la reunión no hay más- ése es el problema.

• Modelo congregación: Las reuniones son centralizadas toda pasa por el salón de reunión. Ejemplo: martes reunión, jueves reunión, sábado reunión, domingo reunión.

Modelo familia: Descentralizadas realizando se los hogares. Ejemplo: martes en lo de José, jueves en lo de Fabián, sábado en lo de Iván, domingo en lo de Antonio.

• Modelo congregación: Lo principal son las reuniones.

Modelo familia: Es más importante el estar relacionado con los hermanos que participar de las reuniones, (ojo, no quiere decir que no participe de las reuniones, porque la palabra dice que participemos), estoy hablando de contrastes; no es eso lo absolutamente fundamental, sino que lo fundamental lo que alimenta esa reunión es la relación que hay entre los hermanos. Es imposible vivir la vida cristiana sin relacionarse, esto es muy importante.

• Modelo congregación: La mayoría de las actividades giran alrededor del pastor o los pastores.

Modelo familia. La mayoría de las actividades giran en torno a pequeños grupos de hermanos y todos los hermanos tienen la oportunidad de enseñar, de ministrar y de ocuparse en la obra de señor; pequeños grupos, racimos de hombres y mujeres unidos entre sí, concretamente, haciendo la obra del señor, grupos hacia afuera…

• Modelo congregación: Se evalúa el nivel de consagración por la asistencia a las reuniones. Algunos dirían:- ¡Eso no es así!, pero la tendencia lo demuestra. Ejemplo: -Juana no falta a ninguna reunión, pone su moneda, canta los himnos, coritos, levanta la mano, se nota que está bien con el Señor; o por el contrario:- El hermano Roberto ha faltado los últimos Domingos… debe ser que no anda bien espiritualmente…

Modelo familia: Se evalúa el nivel de consagración por la conducta y la vida familiar, como dijo Jesús: Por sus frutos los conoceréis…

Comentario: Por lo general escuchamos decir:- ¡Ah, no te metas en mi casa, porque ahí todo es diferente… no es la reunión del domingo!... Con esto quiero decir que la casa, nuestra vida diaria, cotidiana, nos muestra la realidad del cristianismo que vivimos y no la reunión del domingo.

Modelo familia: Se intercomunican, se expresan unos a otros, se confiesan, buscan ayuda, cambian sus malos hábitos. Se evalúa el nivel de crecimiento y consagración por la conducta y vida familiar. Vida individual y familiar.

• Modelo congregación: La relación entre los miembros de la congregación es impersonal, es como una masa a la que sólo ves en la reunión. Puede ser un poco exagerado expresarlo así, pero… quizá te ves alguna vez, pero no es suficiente. No hay algo concreto, después de la reunión nos saludamos y… hasta la próxima reunión.

Modelo familia: La relación es personal y se fortalece en la vida cristiana comunitaria. ¡Qué importante es esto ser una familia!

• Modelo congregación: La relación entre los hermanos es impersonal es como una masa de gente que sólo se ve en las reuniones. Pongámosle que se ha exagerado, y que se ven de vez de cuando, pero no estamos en un cuadro correcto el de relaciones personales donde se fortalece la vida comunitaria. Cuando las congregaciones crecen y un hijo se pierde nadie se da cuenta.

Modelo familia: No tenemos miedo que se vayan porque estamos todos unidos por las coyunturas unas con otras.

• Modelo congregación: La edificación se hace en forma masiva, y que cada uno agarre lo que pueda, nadie pregunta nada acerca de lo que entiende y lo que no entiende. Doña Genoveva hace sí con la cabeza y el predicador está contento, pero un día se le ocurre preguntar lo que había entendido, y cae en la cuenta de que la hermana nunca había entendido nada. El enseñar en forma masiva no permite saber si se comprende o no la enseñanza, algunos entienden más otros menos…

Modelo familia: La enseñanza se da en forma personal, es cálida, mostrando toda la gracia de uno hacia el otro. Podría decirse “cara a cara”. Hay posibilidad de preguntar, de corregir, de ser formado, en tanto hay alguien que me conoce, que sabe de mis puntos fuertes y de mis debilidades. No se puede ir uniendo y aconyuntando así nomás. Se debe estar relacionado en el cuerpo como indica Efesios 4.

Habría mucho más por decir. Pero nuestra intención es compartir y mirar su palabra, cómo fue la iglesia que los apóstoles edificaron, cómo se relacionaban, cómo se ayudaban, cómo tenían todo en común, tenían un mismo sentir. Habría problemas, había ataques del maligno pero creo que el amor era sin ninguna duda la prioridad de la iglesia primitiva.

Reflexión final:

Para llevar a cabo esto se necesita una convicción: que esto es de Dios, que este es el modelo de Dios, la única manera de llevar a cabo la obra de Dios. Él no propuso una congregación teológica, un edificio, asientos y numeró la gente con un programa espiritual…El propuso a su cuerpo como familia de Dios, el cuerpo de Cristo. Su iglesia es su cuerpo, su familia. El cuerpo bien concertado, unidos unos con otros; hasta que todos seamos formados a la imagen del hijo de Dios, todo el cuerpo bien concertado y unido por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente. ¿Cómo uno puede alcanzar el propósito eterno de Dios? Con un arrepentimiento según la palabra (no como lo entienden las denominaciones con el llamado de Cristo en Marcos 8, 34-35y LUCAS 14-35-36). Es un llamado a la consagración, a entregar todo para el Señor, y si eso es lo que hacemos necesitamos ayuda, y la ayuda viene no por una iglesia tipo congregación, en donde tenemos tantas reuniones por semana o por mes, sino por la iglesia familia de Cristo, de Dios, intercomunicada, relacionada, todos los días de la semana, pequeños grupos de dos o tres, obrando juntos, saliendo para ganar a otros.
La iglesia está, crece, no porque hay una manifestación de un predicador muy importante, que viene de no sé dónde. Sino por la natural cooperación de cada miembro, del cuerpo ganando a su vecino y creciendo lo a los pies de Cristo. No hay nada más maravilloso que el nacimiento de un nuevo discípulo en le iglesia del Señor.

Dios está formando una familia, su pueblo amado, Amen.

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