La obra de la Iglesia en la casa no es la obra que se hace en casa sino la obra que la Iglesia que se reúne en la casa hace en todo tiempo y en todo lugar   La función de los líderes es llevar a los hermanos al desempeño de su servicio. Ellos no deben hablar mucho en los encuentros.   Hay dos tipos de encuentros: los de participación o desesperación. La falta de participación es indicio de deficiencia en el servicio de los santos.   El trabajo por niveles de madurez es uno de los aspectos más importantes para supervisar en el funcionamiento de las coyunturas.   El encuentro casero debe ser dinámico, rico y vivo; y debe haber tiempo para que acontezcan varias de estas prácticas.   Los líderes deben tener un buen compañerismo. El núcleo de discipuladores es el equipo de trabajo de los líderes.

10 Prácticas Indispensables para el trabajo de la Iglesia en Casa

 

1.    Oración y adoración. Un tiempo de Calidad

2.    Cena. Si es posible en todos los encuentros

3.    Participación. Profecías, testimonios.

4.    Trabajo por Niveles de madurez. Supervisión del Servicio de los hermanos. Supervisar la edificación y funcionamiento de las coyunturas, incluyendo las coyunturas familiares.

5.    Trabajo hacia afuera. “Oikos”, casas y calles (en las coyunturas), pórtico (ser iglesia en las calles). Independientemente de estas estrategias, el grupo debe tener salidas juntos, periódicamente.

6.    Revisión de la enseñanza. Por parte de los líderes. Por CD’s o DVD’s.

7.    Espíritu de familia. Los hermanos deben conocerse y participar unos de las dificultades de los otros. Tener comidas juntos y tiempo de esparcimiento juntos.

8.    Provisiones y ofrendas. Como parte de la adoración al Señor, no como procedimiento administrativo.

9.    El Núcleo. Debe reunirse periódicamente para preparar y cuidar el trabajo del grupo

10.                       Los discipuladores. Reunir frecuentemente a los discipuladores para orientar el cuidado de cada discípulo.